
Paul McCartney era el encargado de vocalizar
esta pieza, escrita a mediados de los cincuenta, por uno de los pioneros del
rock and roll como es Little Richard.
Desde muy joven McCartney solía imitar la voz
de Little Richard ya que era uno de sus grandes ídolos.
Cuando los Beatles se presentaron en Star Club
de Hamburgo, en 1962, tuvieron la oportunidad de conocer a Little Richard quien
le dio a McCartney algunos consejos y técnicas vocales.
Se sabe incluso que en aquella oportunidad Brian
Epstein le ofreció a “Little Richard” un porcentaje de su contrato de representación
del cuarteto pero éste declino la oferta.
La razón de su rechazo, según algunos, obedeció
a la profunda antipatía que sentía el célebre cantante y pianista por John Lennon
quien aparentemente no hacia mas fastidiarlo con bromas pesadas y comentarios acerca de su condición de
homosexual.
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